07 Sep El uso del gel de calor en la práctica deportiva
Una de las conversaciones recurrentes en la consulta, especialmente con los pacientes deportistas, es el uso de las cremas y geles de efecto calor concebidos para la práctica deportiva. Es un tema de especial interés para aquellos pacientes que han padecido lesiones de tipo muscular y llegan a la consulta con una batería de preguntas preparadas: ¿funcionan?, ¿merece la pena?, ¿realmente calientan el músculo?, ¿cómo se aplican?, ¿dónde adquirirlos? En este post responderemos a todas las preguntas de la mejor manera posible.
¿Cómo Funcionan?
En primer lugar se debe tener muy en cuenta que la mayoría de los geles no provocan un calentamiento real del músculo sino una reacción a nivel de las capas superficiales de la piel. Es decir, no provocan una vasodilatación profunda que facilite un mayor aporte sanguíneo flexibilizando el músculo y preparándolo para la actividad, sino que actúan en los termorreceptores del sistema nervioso periférico, provocando sólo sensación de calor. Esta sensación puede llevarnos a creer de manera errónea que ya estamos preparados para un ejercicio explosivo, y sufrir así una lesión (o una recaída). Podemos aprovecharnos del aumento de temperatura superficial en la preparación para la actividad física, pero en ningún caso pueden sustituir a un buen calentamiento.
¿Cuándo aplicarlo?
En segundo lugar, desde nuestro punto de vista, lo ideal sería aplicar el gel de calor entre el calentamiento y la parte principal de la sesión de entrenamiento, una vez que ya existe una activación real de la musculatura, haya habido o no una lesión previa. Los usuarios habituales de estos geles son deportistas que acaban de recuperarse (o todavía están recuperándose) de una lesión. Es especialmente importante aplicarlos en el momento adecuado. En pacientes recuperándose de una lesión, el objetivo principal del calentamiento será la activación de la circulación sanguínea en los grupos musculares. El calor que provoca el gel nos ayudará a mantener una sensación de confort en la zona de la lesión y nos sentiremos más seguros durante la práctica del ejercicio.
¿Cómo aplicar un gel de calor
En tercer lugar, además de entender su función y el momento en el que aplicarlo, es importante hacerlo de manera adecuada. Lo más conveniente es aplicarlo con un buen masaje de pases rápidos y muy profundos de no más de un minuto o minuto y medio (lo que se conoce como masaje de pre-competición).
¿Qué gel de calor comprar?
Finalmente, en cuanto a cuáles emplear y dónde adquirirlos, hoy en día existe una grandísima variedad. Para las primeras veces lo ideal sería empezar aquellos productos que tengan varios grados de calor, y probar lo más suave para familiarizarse con las sensaciones. Cada vez son más fáciles de encontrar en tiendas de deporte, gimnasios, y por supuesto por internet.
Querríamos destacar que no es muy recomendable el uso del clásico Radio Salil® para calentamiento, ya que contiene antiinflamatorios en su composición y es preferible optar por otros geles con compuestos más naturales.
Como conclusión, aunque las cremas de calor son útiles, no son estrictamente necesarias, así que su (buen) uso queda a gusto del paciente. No a todo el mundo le resulta agradable la sensación que producen. Pero sí es cierto que utilizados correctamente pueden ser muy beneficiosos en la readaptación deportiva. Desde Clínica Nupofis te animamos a acudir a nuestra consulta de fisioterapia deportiva para tratar cualquier lesión provocada por el deporte o para consultarle a nuestros especialistas todas tus dudas.
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